viernes, 17 de abril de 2009

Astronomía. Mi telescopio. Planetaria

Ya he descrito mi telescopio. Ahora llega la hora de la verdad.


En esta entrada voy a analizar como se comporta el SW dob 8" (una forma abreviada de nombrar este telescopio) en planetaria.


Mi primera observación con el instrumento se remonta al jueves de la semana que me llegó (me llegó el miércoles). No lo pude usar antes por el mal tiempo. Además, esa noche pude observar un objeto, que era el único que no estaba cubierto por las nubes. Dicho objeto es único e irremplazable: nuestro solitario satélite, la Luna.


Empecé la observación. Hacía algo de viento. La Luna se presentaba con un creciente fabuloso. A simple vista no se distinguia gran cosa, solo la forma y algunos mares. Con el buscador se veia bastante brillante, el contraste creció y se veían solo los cráteres más grandes, como Clavius. Pero, al observarla a través del tubo principal con el ocular SP25, solo pude exclamar un grito de dolor. Casi me quedo ciego. Pasó un buen rato hasta que volví a recuperar la vista. Entonces, tuve una idea: ¿Por qué no poner el cubre-objetivo quitando una tapita chica de 50 mm, para verla a grandes aumentos, pero con la cómoda luminosidad que mostraba el buscador?


Así obre, y lo que antes era como intentar ver el filamento de una bombilla encendida, ahora era como verlo con la bombilla apagada. Se me mostró un gran número de cráteres de hasta 10 km de diámetro, porque el seeing era malo (recordemos el viento, así como alguna que otra nube que pasaba por delante). Pude ver la cadena de cráteres de Clavius, la forma de Tycho, el pico central y las terrazas de Copernicus, ondulaciones en los mares a forma de topos que surcan los campos, dejando su inconfundible rastro, etc. Sin embargo, el seeing era tan malo que, al pasar al ocular SP10, no pude ver nada nuevo, y la imagen era tan inestable y borrosa que parecía que estaba detrás de una lente, como una fotografía mal enfocada, y vibraba como si un terremoto la sacudiese.


La noche siguiente se había despejado por completo, y ya no soplaba tan fuerte el viento, siendo el seeing bueno. Primero apunté a la Luna, pero vi lo mismo que el día anterior, porque el cielo no estaba lo suficientemente negro.


Después apunté a Saturno. A simple vista parecía una estrella brillante en Leo, a través del buscador parecía un muy pequeño disco. Pero lo mejor fue cuando lo vi a traves del SP10. Sin palabras. Un disco grande y achatado, atravesado por el eje mayor por una linea recta, del mismo color que el disco, un color amarillo-anaranjado. Pero mejor es que lo veais vosotros.

Proviene de un video de 10 segundos, apilado con Registax y procesado con Photoshop.

Por último, volví a apuntar a la Luna. La vi más luminosa que nunca. Con el SP10 se podían ver cráteres de hasta 3-4km de diámetro.

Espero que os haya gustado este relato.

jueves, 16 de abril de 2009

Astronomía. Mi telescopio

Éste será el tema principal del "Cuaderno de Adrián". Hablaré de las noticias, opiniones y observaciones.
En éste artículo quiero presentar a mi telescopio, un Sky-Watcher dobson 203/1200. Para los que no entiendan del tema, voy a explicar:
  • Sky-Watcher es el nombre de la marca. Sería como Sony, Ford, etc. Esta marca es una de las importadoras de Synta, una empresa que fabrica telescopios "Made in China", muy baratos, pero con una calidad que rivaliza con las marcas más caras.
  • Dobson es el nombre de la montura. Existen dos tipos de monturas: ecuatorial, que utiliza las coordenadas celestes, reflejo de las terrestres, las cuales permiten el seguimiento de los cuerpos ya sea de manera manual, moviendo los mandos de movimiento lento, o mediante motores; y altazimutal, la más "barata" y sencilla, que permite el movimiento horizontal y vertical, pero cuya motorización es más difícil. Dentro del último grupo entran las dobson: monturas de madera resistentes y suaves, pero muy baratas. Generalmente, las monturas dobson se utilizan para telescopios reflectores newtonianos de tamaño medio en adelante. El telescopio en cuestión es uno de tamaño medio.
  • 203 es la apertura del objetivo, expresada en milímetros. Cuanta mayor sea la apertura, más luz recogerá el instrumento y, por tanto, más objetos observará. Del mismo modo, cuanto mayor sea la apertura, mayor poder de resolución tendrá el instrumento (se calcula dividiendo 120 entre la apertura del objetivo expresada en milímetros, apareciendo el resultado expresado en segundos de arco. En el caso de mi telescopio, el resultado es de 0.8", con lo cual se podrían dislumbrar detalles lunares de aproximadamente 2km), lo cual implica la posibilidad de usar más aumentos. El número de aumentos máximo práctico se calcula doblando la apertura del objetivo. En este telescopio, el resultado se aproximaría a 400x.
  • 1200 es la longitud focal del instrumento, expresada en milímetros. La longitud focal es la distancia entre el objetivo (en este caso, un espejo parabólico) y el foco, aproximadamente donde se sitúa el ocular. Cuanto mayor sea la longitud focal, más fácil será conseguir aumentos altos.
Como podeis ver en la imagen, se trata ya de un telescopio serio. Pesa sus buenos 20kg, por lo que hay que desplazar por separado tubo y montura. Lo pedí en Astrocasión un sábado-domingo y me llegó el miércoles siguiente. Me vino con los siguientes accesorios:
  1. Lo más importante: el tubo.
  2. La montura, herramientas y tornillos para montarla.
  3. Un buscador recto de 9x50, con su respectivo soporte.
  4. Enfocador Crayford Standard de 2", uno de los preferidos por los aficionados.
  5. Adaptador de 1.25" a 2".
  6. Oculares SUPER-PLÖSSL de 10 y 25mm (1.25"), que me darán 120 y 48 aumentos respectivamente.
  7. Porta-oculares para 3 oculares de 1.25" y uno de 2".
  8. Mango de tensión para la montura.
  9. Mango de freno para la montura.
  10. Llaves para colimación.
Éste telescopio es ideal para cielo profundo por su luminosidad, pero también lo es para planetaria por su mediana relación focal. Lo malo, tal vez, es eso, su luminosidad: la primera vez que apunté a la Luna, no pude ver nada, porque me deslumbró. Para planetaria funciona bastante bien, porque Saturno se veía de 10 con 120 aumentos.
En cielo profundo, probé con M42 y M45. M42 es la Gran Nebulosa de Orión. Se veía fenomenal, tanto con 48 como con 120 aumentos. Lo mismo digo para M45, o cúmulo de las Pléyades. Se veían cientos y cientos de estrellas. Era imposible fijarse en una sola durante más de un segundo.
Espero que os haya gustado. Mañana escribiré más.

miércoles, 15 de abril de 2009

Presentación

Hola. Me llamo Adrián, tengo 14 años y resido en Jaraíz de la Vera.


He creado el "Cuaderno de Adrián" con el fín de acercarme más a la gente, así como para publicar en la web mis comentarios acerca de temas concretos. Además de mis comentarios, publicaré entradas de noticias y de sucesos personales.


Saludos